Sinopsis

La combinación de arquitecto y cocinillas no es algo muy habitual, aunque en realidad son dos artes que tienen bastante en común, tal como el propio autor de este precioso libro de Recetas dibujadas de Córdoba nos cuenta en la introducción.

Y es que la arquitectura y la cocina comparten ese gusto por las medidas inexactas, y de la misma que al añadir aceite a un gazpacho hay que echar "el que admita", al elaborar una masa de arcilla o un mortero, la cantidad de agua también depende de una percepción que solo se adquiere con la práctica.

Pero volvamos al asunto que tenemos entre manos, y que no es otro que este delicado libro de recetas ilustradas de la gastronomía cordobesa. En sus páginas encontramos deliciosamente dibujadas y perfectamente explicadas recetas clásicas como el gazpacho, el salmorejo o el pisto, pero también otras menos conocidas como el perol de arroz con gallo muerto o la ensalada de naranjas picás.

Todo ello maquetado en un libro que sólo podría haber ideado un arquitecto, con un formato y un papel más propio de un cuaderno de bocetos que de un libro de recetas, aunque dado que se trata de recetas dibujadas, tiene todo el sentido. Sin duda, un imprescindible en la biblioteca gastronómica.